La escasez de chips es un tema que está en boca de todos. La falta de estos dispositivos está afectando severamente a todo tipo de industrias, principalmente la automotriz y la relacionada a las tarjetas de pagos.
Pero, ¿qué factores afectaron la producción y causaron esta escasez de chips? Muchos ven el origen de este fenómeno en el cese de producción en las fábricas de estos insumos. Otros aseguran que el factor principal fue el incendio de una de las productoras más grandes del mundo.
Igualmente, con la pandemia, creció la demanda de computadoras, tabletas y teléfonos celulares para poder realizar labores y estudios desde casa. Mientras que la demanda de vehículos fue menor. Esto ocasionó que los vehículos redujeran sus pedidos de chips.
Ante esto, los fabricantes de este insumo cambiaron sus prioridades. Pero, cuando en el tercer trimestre de 2020 los automóviles volvieron a demandar chips, la producción se desequilibró. Actualmente, la situación es tan complicada que los fabricantes de autos se han visto obligados a ralentizar el ensamble de vehículos, lo que ha causado una falta de automóviles entre los distribuidores.
Otras industrias en el mercado también han sido afectadas. Por ejemplo, el año pasado los jugadores de videojuegos tuvieron problemas para comprar nuevas tarjetas gráficas. Igualmente, Apple necesitó escalonar el lanzamiento de su entonces más reciente iPhone, mientras que los fabricantes de Xbox y PlayStation no pudieron satisfacer la demanda.
Incluso, industrias que no se pensaría tienen relación con microchips fueron afectadas, como Nike y Adidas, por la falta de insumos para las computadoras y otros dispositivos con los que se fabrican los productos. O Coca-Cola, por retrasos en maquinaria y componentes electrónicos. Por supuesto, la disponibilidad de tarjetas de pago de servicios, de crédito y débito ha sido menor.
La conversación y reacciones ante la escasez de chips en el mundo
Es notorio que la falta de semiconductores o chips ha causado múltiples repercusiones. En SentiOne decidimos, a través de la escucha social o social listening, revisar cuáles han sido las reacciones y la conversación que se ha generado entre el público ante esta situación.
El análisis se realizó desde septiembre de 2021 a septiembre de 2022, es decir, por 12 meses.
La conversación en torno a la escasez de chips en México de septiembre 2021 a septiembre 2022. Información obtenida a partir de la herramienta de social listening SentiOne.
Como se puede notar, la mayor conversación sobre este hecho ocurrió de septiembre a noviembre, con su mayor pico en octubre. La mayor parte de las reacciones fueron neutras (73.57%), pero al comparar las negativas y positivas, las primeras superaron a las segundas (18.73% vs 7.70%, respectivamente).
En la conversación relacionada a la escasez de chips destacaron más los sentimientos neutrales y negativos que los positivos.
Los espacios virtuales donde más se ha conversado o publicado sobre el tema han sido Facebook y Twitter, pero también en diversos sitios de noticias, así como especializados en negocios e industria automotriz, como El Economista, Motor Pasión, MSN, Enrique Dans, HTC Manía, entre otros.
Las fuentes principales en torno al tema de la escasez de chips de septiembre 2021 a septiembre 2022, obtenidas con la plataforma de social listening SentiOne.
¿Quiénes han hablado de este tema principalmente? De acuerdo a la gráfica de Proporción de género, más hombres (73.84%) que mujeres (26.16%) conversaron sobre la situación.
La conversación en torno a la escasez de chips ha sido realizada principalmente por el sexo masculino en México (de septiembre 2021 a septiembre 2022).
Las consecuencias de la escasez de chips
En México han ocurrido diversas afectaciones. Por ejemplo, la Secretaría de Movilidad en la Ciudad de México no pudo renovar el sistema Ecobici como planeaba.
. @LaSEMOVI informa que debido a la escasez de chips electrónicos a nivel mundial, la renovación del sistema #ECOBICI será pausada hasta el 14 de septiembre en la #CDMX.
Se espera que para esa fecha dichos componentes tecnología ya esten disponibles para renovar el servicio. pic.twitter.com/lBw2PaTHUo
— Azteca Noticias (@AztecaNoticias) September 2, 2022
Igualmente, en el metro de la Ciudad de México se anunció la escasez de tarjetas para pagar los viajes en este transporte público.
“Por el desabasto de chips electrónicos a nivel mundial, podría haber insuficiencia de tarjetas“ Se lee en algunas taquillas del metro 😱 https://t.co/27C9oEaEce
— unocero.com (@unocero) September 1, 2022
Así mismo, en la planta de General Motors en Silao, Guanajuato, se anunció un paro técnico del 29 de agosto al 5 de septiembre. Esta fábrica se encarga de producir, entre otros, los modelos Silverado, Cheyenne y GMC Sierra.
"¿Y la Cheyenne, apá?"
Debido a la escasez de chips, la planta de @GeneralMotorsMx en Silao, donde se producen la Chevrolet Cheyenne, Silverado y GMC Sierra, hará un paro técnico a partir del 29 de agosto
Espera retomar la producción el 5 de septiembrehttps://t.co/CLSgJGv546
— NEGOCIOS (@reformanegocios) August 25, 2022
A nivel mundial, como se comentó antes, la producción de tarjetas de débito y crédito resultó afectada: mil millones de plásticos posiblemente no se fabriquen en los próximos 18 meses.
La escasez de chips ya tuvo repercusiones en la producción de tarjetas de crédito y débito. Hasta mil millones de plásticos corren el riesgo de no ser emitidos en los próximos 18 meses, advierte Antonio Peláez. Así que no pierdas el tuyo. https://t.co/M9Q85BqeNn
— EF_Opinion (@EF_Opinion) August 10, 2022
Pero, dentro de todo, hay quienes han ganado con esto, como la industria de los vehículos usados.
Finalmente, algunas industrias ya están tomando medidas para recuperarse o ya ven la recuperación en el horizonte, como Intel y Mitsubishi.
En medio de la escasez de chips, @intel anunció que construirá dos fábricas en #Alemania y anunció otros proyectos, como un centro de embalaje y montaje en Italia. #TrendingREFORMA https://t.co/7iq8l7Rt9j
— REFORMA (@Reforma) August 6, 2022
No sabemos por cuánto tiempo esta situación continuará ocurriendo, pero no hay duda de que se trató de otra más de las consecuencias del cataclismo económico que causó la pandemia que tendrá repercusiones, muy posiblemente por el siguiente lustro o más allá.
